Lámpara votiva - CLXXI

Ya se ha dicho alguna vez:
la muerte es bella
desde que tú estás en ella.

Y, sí, ahora son bellos
los recuerdos, la soledad,
el hastío y aun la tristeza.

Todo es bello
porque todo,
desde que te fuiste,
es un mar de esperanza
(la esperanza de volverte a ver).
 

Lámpara votiva - CLXX

El mar el viento
los bosques ya no valen
lo que tus ojos.
 

En el cielo de tu mirada ...

En el cielo de tu mirada
es donde besé estrellas;
en el libro de tu alma
es donde aprendí a leer;
en el feraz territorio de tu piel
es donde supe dónde (y para qué) había nacido.

En fin,
fuiste tú
mi norte,
mi camino,
mi mejor utopía, ...
 

Lámpara votiva - CLXIX

Nuestro reencuentro
anida la alegría
del primer beso.
  

Lámpara votiva - CLXVIII

Por tu sonrisa
vivir valió la pena
y aún ahora.
  

Lámpara votiva - CLXVII

Por tu recuerdo
es más vida la vida
también la espera.
 

Lámpara votiva - CLXVI

Escucho voces
que repiten tu nombre
y soy yo mismo.
 

Lámpara votiva - CLXV

Eres tú y otra
y todas las mujeres.
Ya eres eterna.
 

Lámpara votiva - CLXIV

Desde tus ojos
una luz infinita
saciará mi alma.
 

Lámpara votiva - CLXIII

En mutua ofrenda
ante el altar divino
de nuestras almas

devotamente
fuimos un mismo cuerpo
y pensamiento.
 

Lámpara votiva - CLXII

Qué cálido era nuestro hogar cuando estábamos todos reunidos alrededor del fuego de tu amor.

 

Lámpara votiva - CLXI

Si hubiera imaginado cuanto me ibas a querer, hubiera sido mejor persona.
 

Lámpara votiva - CLX

Me hiciste creer
en el amor eterno.
Sigo creyendo.
 

Lámpara votiva - CLIX

Amor primero
para toda la vida
diste a mi vida.
 

Lámpara votiva - CLVIII

Como esperando
el sol de un nuevo día
te sueño ahora.
 

Lámpara votiva - CLVII

Idos los mares y las estrellas, los árboles y los vientos, y aun el amor y la vida, me pregunto si te habré procurado alguna felicidad.